Centro de Barrio

Levantamiento topográfico de las plataformas del sur del centro de barrio con mapeo de gradiente magnético y excavaciones en blanco.

A partir de 2019, el proyecto comenzó a investigar el centro del barrio sur de Tlajinga. La investigación se centra en cómo los espacios públicos y semipúblicos del centro del barrio funcionaban para cohesionar a los vecindarios y sus interacciones sociales. Dentro de la ciudad, estos centros incluyen complejos arquitectónicos multifuncionales que cumplían funciones cívico-ceremoniales y que posiblemente albergaron a élites intermedias, además de ser sede de actividades rituales.

Las excavaciones en los complejos de plataformas del centro del barrio sur —Complejos 2 y 4 de S4W1— revelaron patios rodeados de estructuras con técnicas constructivas más elaboradas que los conjuntos departamentales, incluyendo pisos encalados y paredes adornadas con pinturas murales y elementos escultóricos. Los análisis de residuos químicos en las superficies de los pisos sugieren diversos usos: las primeras fases de ocupación combinaban funciones residenciales y rituales, mientras que las fases posteriores se caracterizan más por un uso cívico-ceremonial, como lo indican las escasas evidencias de actividades culinarias y la presencia de artefactos rituales como incensarios y depósitos que contenían cuentas de concha de espondilo y mineral de hierro, así como parafernalia ritual.

El arte mural descubierto en los complejos de plataformas presenta una rica iconografía que incluye aves, mariposas, flores de cuatro pétalos, motivos de agua y fuego, ojos de plumas y símbolos asociados con la guerra y el más allá. Estas imágenes concuerdan con la cosmología y el simbolismo político de Teotihuacán, enfatizando temas como la guerra sagrada, la preciosidad y la transformación. La decoración y la organización espacial indican que el centro del barrio era un punto focal para las actividades comunitarias, la socialización y, posiblemente, el entrenamiento militar, lo que refleja el papel de las élites del distrito en el mantenimiento de la cohesión social y los rituales públicos que integraban a la población.

El enfoque interdisciplinario que combina excavaciones, estudios geofísicos, análisis de artefactos y estudios de residuos químicos en el suelo permite comprender mejor las diversas funciones sociales de los espacios dentro del centro del barrio de Tlajinga. Resalta cómo la periferia urbana de Teotihuacán contaba con una compleja infraestructura social con edificios especializados que eran accesibles a la comunidad y, a la vez, estaban simbólicamente conectados con la metrópolis. Los centros vecinales distribuían la arquitectura cívico-ceremonial por toda la ciudad, proporcionando infraestructura social a nivel de distritos para la gran población urbana.