¿Cigüeñas?
Cuando bajé del tren en la ciudad de Alcalá de Henares, una ciudad pequeña que está al noreste de Madrid, me quedé atónito por la belleza de lo que había delante de mis ojos. La yuxtaposición de esta ciudad tranquila con la metrópoli próspera que es Madrid era increíble y, honestamente, a pesar de mi amor por mi casa durante las últimas cuatro semanas, estaba disfrutando mi huida de la jungla de asfalto. A pesar de todo, después de llegar, uno de los primeros lugares donde fui en la ciudad era La Universidad de Alcalá y, como con el resto de la ciudad, las palabras no podían expresar su belleza. El edificio solamente era superado en su tamaño por su elegancia, un hecho que era difícil de negar, pero después de examinarlo con asombro, me di cuenta de que había un ave en la cima de la universidad. Y no era cualquier ave. ¡El ave era enorme!
«¿Qué es eso? », pensé. «¿Qué ave es tan grande, y vivirá allí?» Fue entonces cuando oí la palabra «cigüeña» a alguien cerca de mí. «Espera un momento», reflexioné. «¿En serio?» Con un segundo vistazo, vi que esa persona tenía razón: ¡había una cigüeña allí! Era la primera vez que veía una cigüeña en mi vida. Aunque, después de eso, ¡quise solamente saber quién estaba esperando un niño!