Sin Destino
En mi primer sábado en Madrid, yo empaqué en mi mochila un mapa, una botella de agua, mis llaves, mi teléfono y mi billetera, y salí para explorar la ciudad. Yo no había investigado los sitios famosos de Madrid, así que todo era nuevo para mí. Caminé desde la estación de metro que se llama Alonso MartÍnez, sin rumbo. Después de treinta minutos, me encontré un arco grande en el medio de una calle concurrida. Ahora, sé que este sito es la Puerta de Alcalá, y es muy importante para la historia de Madrid. Cuando vagas porla ciudad de manera informal, ganas un sentido genuino del lugar que te rodea.